martes, 16 de agosto de 2016

NUTRICIÓN: Una Cuestión de Equilibrio (4) EQUILIBRIO GÚNICO

EQUILIBRIO GÚNICO





Las frutas y verduras frescas, tomadas preferentemente crudas y en abundancia,
son vitales para la salud. 
      Los jugos de frutas y verduras frescas ejercen un beneficioso efecto sobre el organismo.
      Las frutas, verduras y nueces son alimentos superiores a la carne.
Elimina el azúcar y los alimentos con alto contenido de féculas.
Ingerir un exceso de alimentos ricos en almidón es muy perjudicial para la salud, en especial, aquellos que se han elaborado con harina refinada.
El envenenamiento del colon lo ocasiona el pan blanco.
Elige los cereales integrales frente a los refinados.
Cuando sientas deseo de comer dulces o algo ligero, lo mejor es fruta, 
que puedes tomar con nueces u otros frutos secos.
Toma siempre proteínas, ya que el cuerpo las necesita. 
Ahora bien, el exceso de proteínas es tan perjudicial como su deficiencia.
No te habitúes a comer proteínas provenientes de la carne, 
pues generan sustancias tóxicas en el organismo.     
  Un poco de aceite de oliva, cada día, mantiene sanas las articulaciones.   

      Elige los cereales integrales frente a los refinados.
No seas fanático de las dietas.
Equilibra tu dieta y luego olvídala.
Si tienes el antojo de algún alimento que no resulta beneficioso para ti, no seas remilgado y cómelo. Pero no dejes que esta práctica ocasional se convierta en un hábito.
No caigas en la rutina alimenticia, varía los alimentos y combínalos adecuadamente.
                                                                                                                           
 Paramhansa Yogananda

          LAS GUNAS
Enseñan los Vedas que toda acción es engendrada universalmente por los atributos o gunas de Prakriti (la Naturaleza creada por Dios). Estas cualidades o gunas son tres (tamas, rajas y sattwa) y nadie en este mundo, ni entre las deidades del mundo astral, está exento de ellas. El cuerpo humano, como los demás productos de la Naturaleza Cósmica, se encuentra regido de forma inexorable por estas tres cualidades que son el origen de la constante actividad.
El ser humano no puede permanecer inmóvil; está obligado constantemente a realizar actividades que, en función de la preponderancia de una u otra guna, serán positivas, negativas o mixtas.
La guna tamas es negativa u obstaculizadora y genera el mal y la ignorancia. Las actividades nocivas o tamásicas inducen en el hombre una situación anormal e infeliz.
La guna rajas es neutra o activadora y produce cualidades que permiten el desarrollo material. Las actividades rajásicas son energizantes e inducen la normalidad y la posibilidad de disciplinar cuerpo y mente.
La guna sattva es positiva y elevadora y genera cualidades que inducen el desarrollo espiritual. La actividad sáttvica es la acción física o mental que está guiada por la sabiduría o discernimiento del alma o del gurú. Las actividades de naturaleza sáttvica son beneficiosas para el ser humano y  despiertan la conciencia divina guiándolo hacia la percepción pura del alma. El predominio de alguna de estas cualidades sobre las demás determina el carácter o naturaleza de la persona. A nivel humano, es útil visualizar las gunas como movimiento de energía dentro del cuerpo.
TAMAS
La guna tamásica está asociada a una disminución, o a una retirada, de la energía. La dirección natural de tamas es hacia abajo, similar a la resaca que sigue a la ola. En el cuerpo humano, este flujo descendente de energía produce un sentimiento de depresión, el opuesto emocional de la euforia. La depresión es expresada por el lenguaje del cuerpo: columna doblada, espaldas caídas, boca plegada hacia abajo, mirada al suelo.
Sin embargo, si el movimiento hacia abajo es llevado hacia lo interno, la negación de la energía del guna tamásico puede transformarse en interiorización para encontrar paz interior, paz sáttwica.
Las cualidades tamásicas se caracterizan por: mente obtusa, pereza, indolencia, sueño excesivo, estupidez, pasividad, negatividad, cinismo, depresión, ignorancia, duda, timidez, miedo, hedonismo (apego a los sentidos), oscuridad, crueldad, falta de claridad y materialismo frente a espiritualidad.  La ociosidad, la vagancia o la pereza actúan como agentes paralizantes de la actividad física y mental. El ser perezoso está en un estado de indefensión ya que su alma está gobernada por el cuerpo y la mente.
RAJAS
El guna rajásico es la corriente energizante en la Naturaleza, y también en el hombre mismo. Se manifiesta en el cuerpo como un movimiento ascendente; por este motivo, asociamos toda elevación de energía -sentimiento exultante, por ejemplo- a un flujo hacia lo alto. Con el desarrollo de la sensibilidad espiritual se muestra claramente que este flujo se manifiesta principalmente en la espina dorsal. Aun cuando nuestra conciencia no esté centrada en esa zona, un flujo ascendente de energía y de conciencia en el cuerpo produce la tendencia a mirar hacia lo alto, a estar en pie o sentado bien derecho y a sentirse “arriba” en la lucha de la vida.
Entre las cualidades rajásicas destacan: actividad, movimiento, energía, estimulación, excitación, inteligencia, creatividad, ambición, inquietud, agitación, irritabilidad, impaciencia, descontento, reacción sin reflexión, atracción y repulsión, obstinación, egocentrismo, obsesión, avaricia, emociones extremas (rabia, celos, orgullo, odio, maldad, pasión), egotismo (afán de hablar de sí mismo), dogmatismo, agresión, egoísmo, y cinismo.
SATTWA
La conciencia del alma está más allá de todo estado activo. Para alcanzar este estado libre de actividad deben emprenderse acciones sáttvicas, buenas acciones que conduzcan al recogimiento interior. Son actividades sáttvicas la acción correcta, el control de los sentidos, la meditación, la introspección, la disciplina moral y el desarrollo espiritual.
Pueden considerarse cualidades sáttvicas las siguientes: veracidad, amor, calma, ecuanimidad, no violencia, sabiduría, belleza, bondad, éxtasis, hermandad, claridad, tolerancia, pureza, paciencia, perseverancia, confianza en sí mismo, armonía, concordia, fe, devoción, santidad, luminosidad, altruismo, humildad, equilibrio, felicidad, gentileza, compasión, honestidad, discernimiento, energía, clemencia, generosidad, integridad, disciplina, sinceridad, dulzura y coraje.

En el cuadro siguiente  se detallan las diferencias de comportamiento tamásico, rajásico y sáttvico con respecto a determinados aspectos:

TAMAS
RAJAS
SATTVA
Renuncia a la acción
Es incorrecto abandonar o renunciar a las acciones prescritas por el deber. La renunciación a dichas acciones a causa del engaño se dice que es “tamásica”.
Quien desiste de la acción por considerarla intrínsecamente difícil o por temor a los dolorosos problemas que pudiera ocasionar al cuerpo, practica la renunciación rajásica y será incapaz de alcanzar recompensa proveniente de la renuncia.
Las acciones prescritas por el deber se realizan por el solo hecho de que es menester llevarlas a cabo, sin apego a ellas ni a sus frutos. El renunciante absorto en “sattva”, dotado de sereno entendimiento y libre de toda duda, no aborrece las acciones desagradables ni se deleita con las agradables.
Conocimiento
Conocimiento que, además de ser trivial y elemental, se concentra en un solo efecto, como si fuese el todo, sin tomar en cuenta el motivo ni ceñirse a los principios de la verdad.
Es de naturaleza rajásica aquel conocimiento que, en la totalidad del mundo de los seres, percibe múltiples y variadas entidades distintas entre sí.
Es de naturaleza sáttvica aquel conocimiento por medio del cual se percibe en todos los seres al único e indestructible Espíritu, al indiviso en lo dividido.
Acción
Aquella que se origina en la ignorancia espiritual; quien la ejecuta desconoce sus propias capacidades y no considera las consecuencias: la pérdida de la salud,  la riqueza y la influencia, así como el daño que pudiera ocasionar a otras personas.
Se afirma que es rajásica la acción inspirada por el anhelo de satisfacer deseos personales o la que se lleva a cabo con egoísmo y enorme esfuerzo.
Se dice que es sáttvica la acción de origen divino y que se realiza en un estado de completo desapego, sin experimentar atracción ni aversión y sin desear sus frutos.
Carácter
El agente tamásico vacila sin cesar en cuerpo y mente, carece de escrúpulos, posterga sus deberes y es inconsciente, perezoso, arrogante, malintencionado y quejumbroso.
Está lleno de apego, y lleno de deseo de obtener los frutos de las acciones, y lleno de codicia, impureza e inclinaciones crueles, y que se regocija o deprime con facilidad.
Se conoce como sáttvico al agente que se encuentra desprovisto de todo egoísmo o apego, que permanece inmutable ante el éxito o el fracaso y que se halla dotado de valor y entusiasmo.
Buddhi:   Inteligencia
El intelecto tamásico es aquel que, hallándose envuelto en tinieblas, considera la irreligiosidad como religión y juzga todas las cosas de manera pervertida.
El intelecto rajásico es aquel que hace al hombre percibir de forma sumamente distorsionada lo correcto (dharma) y lo incorrecto (adharma), lo que debe hacerse y lo que no debe hacerse.
Discierne acertadamente los senderos de la acción motivada por el deseo y de la renunciación, de lo que no debe hacerse y de lo que debe hacerse, como causas respectivas del miedo y de la ausencia de temor, del cautiverio y de la salvación.
Dhriti:   Fortaleza
La dhriti tamásica es aquella por la cual el hombre necio no abandona el dormir excesivo, el temor, el pesar, la desesperación y la arrogante vanidad.
La dhriti rajásica es la firme paciencia interior por la cual el hombre mantiene la mente aferrada al dharma (el deber religioso), al deseo y a las riquezas, de cuyos frutos anhela gozar a causa del apego.
Se denomina fortaleza sáttvica a la inquebrantable perseverancia por la cual se controlan las funciones de la mente, del prana y de los sentidos, mediante la práctica del yoga, a fin de evitar que se degraden (que fluctúen caprichosamente).
Sukham:   Felicidad
Aquella felicidad elusiva que se origina y concluye en el autoengaño, y que proviene del dormir en exceso, de la pereza y de la falta de entendimiento, se considera tamásica.
La felicidad que proviene del contacto de los sentidos con la materia se conoce como rajásica. Al comienzo, se asemeja al néctar, pero al final es veneno.
La felicidad trascendental (la dicha suprema) es la que se alcanza mediante el recogimiento reiterado de la mente y en la cual se experimenta la extinción de todo sufrimiento.
La felicidad sáttvica es aquella que surge del claro discernimiento inherente a la realización del Ser. Al comienzo, se asemeja a veneno, pero luego es néctar.









 Los alimentos, como todo lo creado, también manifiestas cualidades gúnicas. Su ingestión provoca en el ser humano la reacción gúnica correspondiente. 
En el cuadro siguiente se detallan las cualidades sáttvicas de diversos alimentos, enseñadas por Paramhansa Yogananda 

CUALIDADES SATTVICAS DE LOS ALIMENTOS

ALIMENTO
CUALIDAD ESPIRITUAL
FRUTAS
Cítricos / naranja /limón
Desvanecen la melancolía/ estimulan el cerebro /
Entusiasmo / esperanza
Manzanas /peras
Paz /tranquilidad ante las emergencias
Plátanos
Calma /humildad
Frutas del bosque /moras
Pureza de pensamiento /calman el pensamiento
Cerezas
Alegría
Coco
Espiritualidad /elevación de conciencia
Dátiles
Ternura /dulzura
Higos frescos
Flexibilidad /aceptación de sí mismo /
suavizan una disciplina demasiado estricta
Uvas
Devoción / amor divino
Melocotón
Altruismo /preocupación por los demás
Piña
Seguridad en sí mismo /confianza en uno mismo
Fresas
Dignidad
Frambuesa
Bondad /gentileza /compasión
Aguacate
Buena memoria
CEREALES, VERDURAS Y HORTALIZAS
Remolacha
Coraje
Maíz
Vitalidad mental
Arroz integral
Afabilidad /dulzura /docilidad
Lechuga
Calma
Espinacas
Simplicidad /pureza /franqueza
Tomates
Fuerza mental /resistencia
Cereales integrales
Fuerza de carácter
Trigo integral
Firmeza en los principios /
Perfeccionamiento de los buenos principios
FRUTOS SECOS
Almendras
Fuerza vital /autocontrol sexual /vigor moral
Cacahuete
Eliminación / fuerza en general
Piñones /anacardos
Desarrollo armonioso del cuerpo
Pistachos
Desarrollo del cerebro / memoria
OTROS
Leche de vaca fresca
Entusiasmo /fresca energía espiritual
Yema de huevo
Energía dirigida hacia el exterior
Miel
Autocontrol
Jarabe de arce
Frescura mental

CLASIFICACIÓN DE LOS ALIMENTOS SEGÚN SU GUNA

TAMÁSICOS
RAJÁSICOS
SÁTTVICOS
Frituras
Comida rápida
Comida copiosa
Comida atrasada
Queso curado
Congelados
Alimentos excesivamente cocidos
Conservas
Alimentos refinados
Alimentos de sabor intenso
Nutrientes naturales frescos
Alimentos crudos /biológicos
Alimentos poco cocidos
Alimentos ligeros /simples
Alimentos ligeramente insípidos
Carne de ternera
Carne de buey
Carne de cerdo
Aves
Cordero
Pescado
Huevos
Frutos secos
Nueces
Nuez de coco
Algas
Alcohol
Bebidas gaseosas
Químicos/Sintéticos
Tabaco
Chocolate
Te negro / Café
Agua mineral
Agua soleada y aireada
Leche fresca de vaca saludable(poco)
Almidones
Azúcar refinado
Azúcar de caña
Exceso de lácteos
Legumbres /soja
Semillas /Germinados
Cereales integrales

Patatas
Ajo
Cebolla
Pimienta / Especias picantes
Algarroba
Verduras
Fruta fresca
Aceite de extracción en frio